Turismo Cultural en el Valle del Cachapoal

Este proyecto busca poner en valor una serie de lugares, actividades, hitos y paisajes naturales del Valle del Cachapoal que no están estrictamente catalogadas ni protegidas por la la Ley N° 17.288 de Monumentos, pero que representan un formidable potencial para el desarrollo del Turismo Cultural de este sector de la Región de O’Higgins. 

Buscamos aportar a la promoción, fomento memoria y diversidad identitaria regional, y de las culturas tradicionales locales, promoviendo el intercambio intercultural, para potenciar el Valle del Cachapoal como polo de desarrollo turístico, y a la región como un territorio rico culturalmente. 

El mundo rural del Cachapoal a construido a lo largo de su historia una cultura muy peculiar que está a arraigada a un territorio que podríamos denominar Valle Central y dependiendo a su cercanía respecto a la cordillera, al valle o a la costa han desarrollado prácticas económicas diversas y por tanto un modo de vida diferenciado y con identidades específicas. El valle del Cachapoal se ordena de cordillera a lago Rapel en torno a tres principales ríos como son Codegua, Cachapoal y Claro Aguas Arriba. Estos ríos tienen afluentes que van conformando esta cuenca llamada Cachapoal. 

Dos son las cordilleras que encajonan el Valle, la de los Andes y la de la Costa, llamada esta última Cordón Cantillana. Ambas cordilleras han jugado un rol importantísimo para ordenar el asentamiento de los pueblos y comunidades rurales de este valle practicando una economía asociada a la siembra, a las viñas, a la ganadería arriera a emprendimientos productivos rurales en torno a quesos, miel, hortalizas, artesanías, chacolí, vino artesanal, amasandería, fiambres, mermeladas, y que en el transcurso de una ocupación de más de 200 y 300 años han desarrollado una identidad muy específica expresada en ciertas prácticas y asentamientos que se transforman hoy en un patrimonio digno de poner en valor hacia el turismo. 

Equipo de trabajo.

Producción Ejecutiva: Pola Iriarte.

Investigación y Conducción: Alejandro Elton.

Realización: Hernán González, Gonzalo Rebolledo.

Cámara, sonido, drone: Joaquín Valenzuela, Sergio Requena, Alejandro Elton, Gonzalo Rebolledo.

Música original: Julián Goycoolea, Felipe Espinoza, Pascual Rebolledo.

Difusión: Amanda Valenzuela.